top of page

EL COACHING ES LA PROFESIÓN DEL AMOR


Por Gerlinde Araujo, Coach Miembro de ICF


Cuando estudié Coaching Ontológico, lo hice con el objetivo de conocer como actúa el ser humano, entender el “SER” de cada persona. Sin embargo, al estudiarlo me pasó por el cuerpo y viví un autocoaching intensivo; algo así como ir haciendo un verdadero aprendizaje porque fue volver el conocimiento en acción en forma simultánea.


Esta experiencia, por ejemplo, me ayudó a aceptar mis emociones y principalmente a comprender la importancia de reconocerlas, abrazarlas y aprender de ellas. Reconocerme como un SER auténtico, único, original, dotado de potencial por explotar y ser consciente de todo esto, fue parte de este aprendizaje.

Lo que comenzó como un estudio adicional, buscando herramientas de relacionamiento, se volvió mi forma de vida y mi principal herramienta para complementarla con mi experiencia y estudios académicos y me enamoré del Coaching.


Comencé a vivir esta maravillosa profesión y comprendí que no solo debemos ejercer Coaching transaccional sino un coaching transformacional, que permita transportar a las personas desde donde están a donde quieren ir. Pero para lograrlo uno mismo debe despojarse de juicios, de creencias limitantes y creer firmemente en el otro, en el SER humano; confiar en el proceso y en el cliente y en lo que es capaz de lograr y eso, aunque suene poético solo se puede lograr haciéndolo con Amor a la humanidad y al desarrollo personal.


Cuando prestas servicios de coaching ofreces diálogos liberadores de potencial, de lo que está bloqueando a las personas y les ayudas a descubrir una mirada diferente. Imaginémonos conversaciones de intimidad y humanas, construyendo juntos un lugar poderoso para lograr algo extraordinario. Escuchar a tu Coachee o cliente decir “este es mi sueño” y quiero que me ayudes a alcanzarlo realmente es grandioso.


Cuando Humberto Maturana se preguntaba sobre qué es lo característico del ser humano, solía centrar su respuesta en el lenguaje y la reflexión. Para él, los seres humanos somos los únicos seres vivos que podemos preguntarnos lo que hacemos, es decir, que podemos reflexionar. «Tal vez la reflexión es un don y una maldición humana», afirmaba con frecuencia.


El Coaching puede trabajar con el “Ser auténtico” que significa poder trabajar con sus miedos, sus límites autoimpuestos, su vulnerabilidad en sí y eso significa trabajar con el ser que realmente somos y que estamos siendo. Es preguntarnos: ¿qué es posible ahora que no fue posible antes?. Es un espacio íntimo en el cual a través del amor se permite descubrirse, encontrarse y amarse a uno mismo descubriendo el gran ser humano que eres o puedes llegar a ser. Las personas aprenden a conocerse porque se aman y se aman porque se conocen.


Pero no hablemos solamente de manera individual, cuando aplicamos coaching en las organizaciones, es increíble ver cómo las personas se atreven a buscar futuros que nunca pensaron que los van a lograr. Se crea consciencia personal y colectiva y se trabaja en el Ser humano, en el equipo y en la organización como tal. Las personas son invitadas a ser eternos aprendices y estoy convencida de que por medio de esta herramienta poderosa se logra humanizar a las organizaciones logrando resultados increíbles en la productividad, logro de metas, trabajo en equipo que directamente actúan sobre los resultados financieros de las organizaciones.


Para hacer esto el tamaño del mundo del Coach debe ser mucho más grande que el tamaño del mundo del coachee o cliente y justamente ahí es donde el Coach debe trabajar mucho en sí mismo en amarse y aceptarse tal cual es, para poder ayudar a los demás a hacerlo. Pues tal como dice el viejo refrán “Nadie puede dar lo que no tiene”.

Cuando hablo que el Coaching es la profesión del amor, es porque realmente lo siento así; siento que sin ese sentimiento por el ser humano no sería posible crear consciencia de sí mismo, del otro y del mundo como tal.


Julio Olalla (2021), desde su experiencia sostiene que, “no es posible un real cambio en la cultura de las organizaciones si no se aborda simultáneamente la transformación personal de sus miembros, el estilo de coordinación de acciones enfocado al logro de los resultados y los valores que fundan la convivencia al interior de estas organizaciones”.


Según un estudio de Gallup Analytics en el 2021 realizado a 22.000 empresas de varios tamaños e industrias, de 60 países donde involucraron 1.200.000 personas: el 32% de las organizaciones utilizan coaching, 80% planea usarlo; 82% de líderes usan conversaciones de coaching.


El Coach sí influencia y John C Maxwel dice que “Liderazgo es influencia, nada más y nada menos” por lo tanto complementaría diciendo que un Coach es un líder que actúa con amor y que transciende en el tiempo porque toca la vida de las personas, haciendo aparecer la grandeza del otro. La influencia no es traer al cliente a mi verdad sino a su propia verdad.


Sin embargo, el Coach no guía sino acompaña a su cliente a lograr sus objetivos. Hace que las personas se reconecten con su propósito y su grandeza, porque generalmente los seres humanos nos distraemos y dejamos de verla.


Para esto creo importante tomar en cuenta que nuestra mente percibe información del mundo exterior, asocia con lo conocido, evalúa si conviene o no y decide actuar o no. Por esta razón el 95% de nuestras actitudes obedecen a la mente Subconsciente y tan solo el 5% a la mente consciente. El Coach trabaja en esa mente subconsciente, donde están los hábitos, creencias, actitudes, fracasos, éxitos, etc. para que, siendo conscientes de esto, podamos cambiar nuestras actitudes y reacciones. ¿Se imaginan el poder de esto que acabo de mencionar? Pues quien cambia sus pensamientos, cambia también su vida, mas aún cuando haces lo inconsciente, consciente.

La respuesta está siempre en el individuo, pero generalmente no somos conscientes de eso y ahí está el papel del coach. Los coaches no somos expertos que damos consejos, somos el conducto para encontrar soluciones, pues el poder está en el proceso, en el cliente no en el coach y mientras menos directivos seamos, considero que más poder tendrá el coaching y para lograr eso necesitamos despojarnos del ego y actuar con Amor.


Referencia Bibliográfica

2017, Historia y origen del coaching, Cursos en Coaching Global, https://coachingglobal.club/course/julio-olalla/

2020, Humberto Maturana o la biología transformadora del amor,

 

CONOCIENDO A NUESTROS COACHES:

DATOS DEL AUTOR

GERLINDE ARAUJO


  • Una empresaria soñadora por un mundo más humano. Dedicada a transformar vidas y organizaciones

  • Ingeniera Informática, Master en Gestión Tecnológica, Master en Administración de Empresas, Coach Ontológico, Coach de Liderazgo y Coach Ejecutivo.

  • Speaker, Coach and Training certificada en el Jhon Maxwell Team



Publicado 05 de noviembre de 2021

bottom of page